Revisión al trabajo de Capponi y Marshall, “La teoría de conjuntos enriquece el modelo matemático Boniano de la mente”
Fernando Araos U.1
RESUMEN
Este trabajo revisa el libro “Felicidad Sólida: Sobre la Construcción de una Felicidad perdurable, del Dr. Ricardo Capponi Martinez” así como algunos hechos de la vida de este importante psicoanalista chileno, prematuramente desaparecido. Después de revisar obras previas del autor, resume su concepto central, el de Recursos Mentales (RM) y las diversas partes y conceptos de la obra. Concluye señalando el impacto del pensamiento de Capponi tanto en Chile como a nivel internacional.
ABSTRACT
This paper reviews the book “Solid Happiness: about the construction of an enduring happiness” written by Ricardo Capponi Martinez, as well as some facts of his biography, including his premature death.. After reviewing some of the previous books of this Chilean psychoanalyst, we sum up his key concept: Mental Resources (MR) and the different parts and ideas of this book. We conclude mentioning the impact of Dr. Capponi´s work both in Chile as internationally.
KEY WORDS: Psychoanalysis; Neurosciences; Mental resources
El trabajo muestra una complementación fértil de los temas psicoanalíticos-matemáticos entre Ricardo Capponi y su Sra. Victoria Marshall, Dra. en matemáticas. Esta complementariedad, de modo general, les permite profundizar en el tema de las Transformaciones planteado por Wilfred Bion, y desarrollar un punto difícil como es el concepto de Transformaciones en Alucinosis (TA) por él propuesto.
Los autores se detienen en las consideraciones bionianas respecto de la matematización del pensamiento psicoanalítico. Exponen lo que consideran los tres vértices fundamentales en esta línea (las preciso más adelante) y concluyen que, en su momento, Bion carecía de una instrumentación matemática que le hubiese permitido un mejor logro en su propósito de matematizar las TA. Estas conceptualizaciones m matemáticas que los autores abordan y desarrollan y de las que Bion no alcanza a hacer uso, son aquellas referidas a La Teoría de Conjuntos con sus desarrollos. 2 Sostenidos en esta Teoría, desarrollan lo que considero la hipótesis y aporte central de su trabajo, esto es, replantearse la teoría de las Transformaciones bionianas, intentando, específicamente, una clarificación mayor y un distingo, entre las denominadas Transformaciones Proyectivas (TP) y las llamadas Transformaciones en Alucinosis. En el dominio de las Transformaciones, los autores llegan a concluir en su trabajo, que estas últimas son entendidascomo aquéllas que conservan un menor número de invariantes respecto de las primeras.
En el desarrollo de sus hipótesis centrales, los autores precisan con claridad y rigurosidad algunas de las ideas bionianas principales. Considero a continuación aquellas que me parecen más centrales del trabajo. Luego de cada cita me permito algunas reflexiones personales al respecto. También realizo una reflexión al final del texto.
CITAS Y COMENTARIOS:
Para destacar las citas de los autores, las escribo en negrita.
1) “En su afán de construir un método que disminuya la proliferación de teorías y facilite la comunicación y publicación del pensamiento psicoanalítico, Bion se propone matematizar nuestros métodos de observación y algunas concepciones básicas del funcionamiento mental. Subyace a esta aproximación metodológica el valor que dan las matemáticas a la cientificiación de una disciplina” (p.3).
De la cita me parece que cabría problematizar el concepto de “observación” en Bion. Se suele decir, (y el mismo Bion así lo dijo), que la Teoría de Bion es una “Teoría de la Observación”. La pregunta, creo, sería pensar qué trata de observar Bion, cuáles son los hechos psicoanalíticos para él, y consecuentemente con esto, cómo los observa. Estos temas subyacen a los planteamientos de Capponi y Marshall e invitan a ser más desarrollados
Esta cita me lleva a considerar también, que, en mi parecer, el uso de las matemáticas como de la filosofía o la física resultan para Bion solo modelos y no teorías rigurosas a intentar seguir. Los modelos son efímeros y cambiantes no tienen el peso de una Teoría que implica mayores desarrollos conceptuales y mayor permanencia de las mismas en el tiempo. Vemos como, por ejemplo, intentar un paralelo estricto entre la filosofía Kantiana con sus propuestas respecto de lospensamientos vacíos, y, las preconcepciones en Bion, puede llevar a equívocos. En este caso, y remitiéndome al artículo que cito a continuación, me parece que la dificultad está en la consideración respecto del grado de saturación que pueda implicar un “pensamiento vacío”. Es decir, los aprioris kantianos versus las preconcepciones bionianas (Noel Smith, 2013). Lo mismo podría ocurrir con eventuales paralelos estrictos entre las propuestas bionianas y el pensamiento de autores como Platón, Hume, Frege o el mismo Quine, etc., todos autores que subyacen en las argumentaciones bionianas, como lo hacen también los modelos matemáticos. Es por lo mismo, que autores como Parthenope Bion Talamo (1999), han señalado que“…es más correcto hablar de la aplicación de la matemática al psicoanálisis que de su matematización” (p. 77). No se trataría de matematizar el psicoanálisis sino de usar modelos matemáticos apropiándose de ellos desde el psicoanálisis y dándoles entonces el sello propio de nuestra disciplina.
Respecto de la cientifización en Bion, reviso más adelante el tema del denominado misticismo en Bion, ¿Bion un místico?
2) Justamente en lo referente a los hechos psicoanalíticos en Bion, Ricardo Capponi y Victoria Marshall consideran la frase de Bion “…la que debe ser exacta es la relación entre los objetos particulares en la analogía particular y no los objetos mismos” (Bion, 1970, p.12). Dicen que se demuestra así la importancia que le da Bion a “…la relación entre los factores y funciones en juego” (p. 3).
Me parece que en esas citas los autores destacan ideas fundantes del pensamiento bioniano. Cabría quizás remitirse brevemente a su conferencia del año 1971 en Los Ángeles referida a “La Tabla”. Muy sintéticamente, cabría decir que en ese trabajo Bion se refiere a la idea de “simetría”, no al modo en que lo hace Matte Blanco, sino para referirse a dos vértices opuestos y complementarios en el conocer. Algo así como el equilibrio entre blanco y negro, lo bueno que implica lo malo, lo conocido que evoca lo desconocido etc. También, las dos líneas paralelas que solo se juntan en nuestra percepción o que, pensando simétricamente, no se juntan en nuestra percepción, pero sí en nuestra “contraparte mental”, como es el caso del círculo junto a una línea que Bion usa de modelo para representar a los pares conjugados. ¿Cómo se juntan en nuestra subjetividad? Ahí entra el tema de la Relación que tan acertadamente nos señalan los autores con las citas de Bion. Y Bion aborda la relación en el artículo “La Tabla” ya citado, desde las construcciones, las Analogías y desde “C”. Sueños como analogías, narraciones, mitos, que co-construyen relaciones. Esto sería, desde el vértice que yo entiendo a Bion, la sesión analítica, deviniendo en un espacio infinito atemporal pero acotado por el encuadre.
3) La última frase de la cita anterior de Bion que nos recuerdan los autores, “…la relación entre los factores y funciones en juego”, nos lleva al punto que a los autores les interesa y destacan en su trabajo, esto es, el tema de la matematización que intenta Bion del psicoanálisis. Aportan señalando con gran claridad y sintéticamente, que ésta se lleva a cabo a partir de tres grandes áreas:
“i) Precisando las variables de funcionamiento mental, al reducirlas a factores y funciones; ii) Configurando el aparato para pensar desde la geometría y la matemática referido al espacio y tiempo mental; y iii) Describiendo la dinámica del pensar por medio del concepto geométrico de transformaciones” (p. 3).
Consideran que el primero de estos puntos aparece como más coherente y consistente derivando en una matriz o tabla. Que no ocurre lo mismo con los dos puntos siguientes. En ellos, señalan, “…Bion se encuentra con serios obstáculos para poder modelizar el“aparato para pensar” sin la “concretud de la geometría y sin la excesiva abstracción del álgebra” (p. 3). Los autores consideran que “…hay un vacío en la continuidad del trabajo científico del autor, que va desde Transformaciones, donde describe la Transformación en Alucinosis (T en A), basada fundamentalmente en el funcionamiento de la parte psicótica de la personalidad, a un Bion que se va desplazando en Atención e Interpretación hacia los funcionamientos más bien, geniales, creativos y místicos, y a una aproximación de “O” en el medio alucinótico, sin memoria y sin deseo” (p. 4).
Coinciden en esto, me parece, con la mirada de otros autores como Edna O´Shaughnessy (2005). También ella considera que Bion a partir de transformaciones pierde consistencia en sus planteamientos. Consistencia científica en esta última autora y matemática en los autores del trabajo que revisamos. Recordemos que en transformaciones Bion usa la geometría euclidiana y el álgebra de los pares cartesianos para pensar sin el objeto presente. Recordemos también que desde este libro Bion parece renunciar a matematizaciones y transformaciones, al menos en K, como algo central de su trabajo, y entra a incursionar en las transformaciones en O y de O. Deriva así en un modo de observación “científica” diferente. Esto lo preciso más adelante. Me parece que es ahí, cuando su modo de aproximación al trabajo analítico que implica “conocer el objeto desde dentro” 3, lo acerca al denominado misticismo y al filósofo Bergson. Trasciende en cierto modo desde mi punto de vista las matematizaciones para proponer un conocimiento intuitivo, o más que un conocimiento, Bion destaca acá, el punto del devenir con sus particularidades.
4) En esta línea que antes discutía, los autores del trabajo señalan: “Dicha comprensión nos acerca a plantear los conceptos de “sin memoria y sin deseo” y “la fe” como consecuencia de un esfuerzo científico en la comprensión de realidades complejas (el medio alucinótico), y no como aproximaciones religioso -mística” (p. 2) (la letra cursiva es mía).
Como vemos rechazan considerar, como algunos autores lo hacen, que la actitud F propuesta por Bion, tendría sus orígenes en la “…vocación mística y religiosa” de Bion
Coincido con sus argumentos sólo parcialmente. Coincido con los autores del trabajo en que me parece difícil no reconocer la rigurosidad y esfuerzo científico permanente de Bion en toda su obra. Respecto de su “actitud mística”, habría que señalar que ésta es tan válida como la actitud lógica, como aproximación al conocimiento. El libro “Misticismo y Lógica” de B. Russell (1976), aporta una interesante discusión respecto de estos temas.
5) Ya en el plano más específico del trabajo y en el afán de discriminar, con el apoyo de los desarrollos de la Teoría de Conjuntos, de la que no disponía Bion, TP de TA; Los autores tratan de demostrar de qué manera esta Teoría aportaría a la Teoría de Bion de las Transformaciones. Particularmente a aquella de las Transformaciones en Alucinosis. En este caso se trataría de considerar desarrollos matemáticos que consideren transformaciones que van más allá de aquellas del plano geométrico. Dicen que esto es en el afán de poder: “…matematizar transformaciones más complejas, las que nos permitirían matematizar las transformaciones en alucinosis” (p.13) Esto ayudaría a entender mejor y más allá de las intuiciones bionianas el ámbito de la T en A. Precisan que dejan para futuros trabajos considerar como la Teoría de Conjuntos podría aportar también a las ideas de espacio y tiempo mental desarrolladas por Bion.
Destacan que: “…el uso del medio alucinótico puede darse en estados mentales distintos uno de los cuales origina patología, la otra creación” (p. 12). En esta vertiente siguen interesantes ideas desarrolladas por Darío Sor en sus diversas publicaciones.
Desde allí pasan a considerar “…el aporte que da la Teoría de conjuntos para matematizar Transformaciones más complejas, las que nos permitirían matematizar las transformaciones en alucinosis” (p.13).
Más adelante, siguiendo lo antes dicho, se preocupan en su trabajo, de explicar en detalle la Teoría de las Transformaciones entendida desde la Teoría de Conjuntos. Describen entonces los principales desarrollos que se van derivando desde la adopción de la perspectiva de la Teoría de Conjuntos para entender a las Transformaciones. Incorporan luego los aportes que consideran da la Teoría de Conjuntos para matematizar las Transformaciones más complejas, en el intento de lograr así una comprensión más integral, que supra ordene la proposición bioniana de la dinámica del pensar referida a las Transformaciones, especialmente las que dicen relación con la T en A. Se agradecen en estos esfuerzos, los conocimientos matemáticos de los autores. Permiten ampliar los horizontes de comprensión de las teorías de Bion, no obstante, las turbulencias y cambios catastróficos a que quedamos expuestos los psicoanalistas no siempre en sintonía con el saber matemático.
Con este fin los autores precisan la comprensión de transformaciones que postulan permitirían matematizar a las Transformaciones en Alucinosis. Pasan entonces a detenerse en dos grupos de transformaciones: El primer grupo denominado Transformaciones Geométricas que considera seis subclases. La segunda clase de Transformaciones son las Geométricas como Funciones del Plano. Todas estas Transformaciones son finalmente diferenciadas considerando sus posibilidades de flexibilidad y rigidez acorde a las invariantes que presenten. Con estos dos criterios llegan a concluir y proponer que las antes explicadas, transformaciones Conjuntistas y aquella de las Biyecciones del plano, descritas claramente, se adecuan al concepto de Transformación en Alucinosis bioniano. El punto que van desarrollando entonces es sostener que: “…la T en A no es solo un tipo de TP, sino que es cualitativamente diferente, en un sentido matemático además de clínico” (p.22). Dicen unas líneas más adelante (p. 22) respecto del mismo tema, “…demarcamos una diferencia cualitativa entre TP y la TA, en que esta última se caracteriza por el número inferior de invariantes”. Destacan que esta diferenciación, apelando a este criterio, número de invariantes, no pudo ser señalada por Bion en la medida que “…carecía de una teoría matemática que abarcara más allá de la geometría del plano, la cual terminaba en la TP” (Transformación Proyectiva) (p. 22). Por lo mismo entonces para explicar las TA los autores van más allá de la geometría del plano y consecuentemente de las TP. Explican así las TA desde la Transformaciones Conjuntistas y desde aquellas de las Biyecciones del plano.
Como antes dijeron los autores, estas Transformaciones con menos invariantes nos podrían remitir a un universo patológico o a un universo infinito que nos aproxima a “O”. La actitud técnica en este último caso, según nos señala Bion4, sería aquella de la renuncia a ciertas funciones mentales: memoria, deseo, percepción, comprensión. Se logra así un estar en F, lo que nos permitiría intuir, en la situación analítica, el sueño-alucinosis, del otro.5
Así cuando los autores en su caracterización de la TA plantean que enésta, locualitativamente distinto es que a diferencia de las TP la primera posee menos invariantes, vemos que esto se puede complementar con considerar como dijeron antes, que ésta también, desde su vértice creativo y clínico como señalaron, nos aproximan a O y en consecuencia tienen otras cualidades a considerar.
Porque ¿cómo es que la TA nos permitiría el acceso al infinito? Quizás en esa reflexión habría que recordar más lo que antes señalé respecto de la actitud del psicoanalista en F, esta conlleva una suerte de desmantelamiento de su aparato para pensar, renunciando a funciones centrales de éste. Tales son los suministros perceptivos, la comprensión, la memoria y el deseo. Porque claro tal vez se trataría de “conocer desde adentro”. Más exactamente, se trataría no de conocer, sino de devenir, lo que nos remite más a un plano existencial. De ser y no de tener, si nos remitimos a Freud y la diferenciación que hace de las Identificaciones primarias, de las secundarias. Quizás desde esta actitud se trasciende entonces, en cierto modo, el intento de conocer y transformar. Estamos en el universo de la intuición, de la dimensión alucinótica, del misticismo.
REFLEXIONES FINALES
Entre otras cosas el trabajo me lleva a pensar respecto del lugar que Bion le da a lo infinito indivisible. Bion parece pensar en que no es lo mismo la atemporalidad y el infinito psicótico de aquél del “Ser” del modo indivisible de Matte Blanco o del “Universo infinito y sin forma” que él menciona. No podemos confundir los elementos beta, con la cosa en si misma incognoscible. Pero me quiero detener en lo siguiente. Se sabe que Bion era un lector de Bergson. ¿Qué representa Bergson? Para responder esto, sigo acá brevemente el libro “Misticismo y Lógica “de Bertrand Russell (1976). En el libro se destacan dos formas de acercarse al mundo algunas veces complementariamente y otras en oposición: una forma mística y otra científica. En el caso de Russell este último remite al positivismo lógico. Nos interesa la primera. Ésta nos conduce a filósofos que van desde Heráclito pasando por Platón y llegando a Hegel. Y muchos otros. Misticismo se entiende como una postura filosófica desarrollada, como un modo de acercarse al conocimiento del mundo que sostiene la creencia en una forma de sabiduría súbita, directa, inmediata, que contrasta con el estudio lento y equívoco de las apariencias exteriores por una ciencia que se basa por completo en los sentidos. Este momento digamos de iluminación se basa en la creencia en una posibilidad de intuición en contraste con el sentido, la razón y el análisis. Recordemos a Kant, en la “Crítica de la Razón Pura” y la cita que de él hace Bion: “Las intuiciones sin conceptos son ciegas los conceptos sin intuiciones son vacías” (Bion, 1977, p.106). ¿Y Bergson? Éste señala, citado en Russell (1976, p.45), “Hay dos maneras profundamente diferentes de conocer una cosa. La primera implica que nos movemos alrededor del objeto; la segunda, que entramos en él. La primera depende del punto de vista que adoptemos y de los símbolos con los que nos expresemos. La segunda no depende de un punto de vista ni se basa en ningún símbolo”.
El segundo modo de conocer es la intuición, sería dice, “el tipo de simpatía intelectual con la que uno se introduce en un objeto para apresar lo que es único en él y por lo tanto inexpresable” (p. 45). Pienso en lo inefable. Es inevitable reconocer en esas citas a Bion y no evocar también en estas reflexiones las discusiones entre Taylor y Vermote del 2011.
Así entonces:
Los autores se preocupan de considerar las Transformaciones en Alucinosis en Bion. Para este efecto revisan algunos conceptos fundamentales de la obra bioniana. Destacan el vértice Relacional de la Teoría de Bion y desde ahí derivan a las relaciones matemátizadas que Bion propone. Diferencian momentos distintos en la obra de Bion. Digamos uno hasta la tabla y otro desde los últimos capítulos de Transformaciones en adelante. Momento polémico para el desarrollo de su obra no siempre desde ahí, me parece, bien entendida ni apreciada6. Pasan luego a diferenciar las TP de las TA desplegando interesantes propuestas matemáticas con herramientas de este dominio que Bion no tenía. Desarrollan estas últimas considerando algunos interesantes aportes de Darío Sor al tema dela dimensión alucinótica, se plantean numerosas preguntas y destacan el vértice no patológico de estas transformaciones subrayando lo que Bion define como el estar en F y la intuición. Concluyen proponiendo explicar así las TA desde la Transformaciones Conjuntistas y desde aquellas de las Biyecciones del plano. Ambos desarrollos matemáticos derivados de la Teoría de Conjuntos.
En general un muy interesante trabajo con una rica complementariedad entre la disciplina matemática y el psicoanálisis. Especialmente, creo que esto también ocurre, porque entre los autores del trabajo se ha dado la complementariedad que se da en una pareja que se vincula con L: en el contexto de la pasión.
BIBLIOGRAFÍA:
– Bion WR (1970). Atención e Interpretación. Buenos Aires: Paidos, 1974.
– Bion WR (1971). La Tabla. En La Tabla y la Cesura / Bion en Nueva York y San Pablo (pp.11-49). Buenos Aires: Gedisa, 1982.
– Bion WR (1977). Bion en Nueva York. En La Tabla y la Cesura / Bion en Nueva York y San Pablo (pp.73-181). Buenos Aires: Gedisa, 1982.
– Bion Talamo P (1999). Metapsicología y Metamatemática. Buenos Aires: Ed. Polemos
– Noel-Smith K (2013). Thought, Thinking and the Thinker: Bion´s Philosophical Encounter with Kant. En Torres, N. & Hinshelwood, R.D. (Eds.), Bion’s Sources. The Shaping of his Paradigms (pp.124-136). London: Routledge.
– O´Shaughnessy E (2005). ¿Whose Bion? Int. J. Psycho-Anal., 86(6):1523-1528.
– Russell B (1976). Misticismo y Lógica y otros ensayos. Barcelona: Ed. Edhasa, 2001.
-Taylor D (2011). Commentary on Vermote’s ‘On the Value of ‘Late Bion’ to Analytic Theory and Practice’. Int. J. Psycho-Anal., 92 (5):1099-1112.
– Torres N (2013). Intuition and Ultimate Reality in Psychoanalysis: Bion´s Implicit Use of Bergson and Whitehead´s Notions. En Torres, N. & Hinshelwood, R.D. (Eds.), Bion´s Sources: The Shaping of his Paradigms (pp.20-34). London: Routledge.
– Vermote R (2011). On the Value of ‘Late Bion’ to Analytic Theory and Practice. Int. J. Psycho-anal., 92(5):1089-1098.
________________________________________________________________________________________________________________
* Psicólogo, Psicoanalista APCh, fernandoaraosuzqueda@gmail.com
** Desde mi punto de vista esto sería la unicidad y el estar en F. Recordemos también que Bergson era uno de los autores que Bion tenía en su biblioteca (Torres, 2013).
*** Bion (1970) no considera posible hacer recomendaciones técnicas por la especificidad de cada situación de la pareja analítica pero sí se atreve a recomendar la actitud F que destacan los autores, como una actitud técnica de trabajo a entrenar y usar, con nuestros analizados.
**** Recordemos que para Bion “O” es el universo del infinito sin forma. Que en el tema del infinito Bion argumenta que la parte psicótica de la personalidad puede creer estar en “O” y adjudicarle así a Beta cualidades especiales, de casa en sí misma, que realmente no tiene.
***** Concordantemente Matte Blanco distingue el infinito psicótico, nivel 4 de su Estructura Bilógica Constitutiva, del nivel 5 de su modelo, que sería aquél del infinito propiamente tal y que resulta en armonía con el modo de ser indivisible.
****** Suele ser ese el libro en el que algunos entusiastas de Bion abandonan la tarea de seguir profundizando en su pensamiento.
- Psicólogo, Psicoanalista APCh, fernandoaraosuzqueda@gmail.com
- Teoría a la que Matte Blanco echa mano exhaustivamente, particularmente para fundamentar su idea de infinito.
- Desde mi punto de vista esto sería la unicidad y el estar en F. Recordemos también que Bergson era uno de los autores que Bion tenía en su biblioteca (Torres, 2013).
- Bion (1970) no considera posible hacer recomendaciones técnicas por la especificidad de cada situación de la pareja analítica pero sí se atreve a recomendar la actitud F que destacan los autores, como una actitud técnica de trabajo a entrenar y usar, con nuestros analizados.
- Recordemos que para Bion “O” es el universo del infinito sin forma. Que en el tema del infinito Bion argumenta que la parte psicótica de la personalidad puede creer estar en “O” y adjudicarle así a Beta cualidades especiales, de casa en sí misma, que realmente no tiene. Concordantemente Matte Blanco distingue el infinito psicótico, nivel 4 de su Estructura Bilógica Constitutiva, del nivel 5 de su modelo, que sería aquél del infinito propiamente tal y que resulta en armonía con el modo de ser indivisible.
- Suele ser ese el libro en el que algunos entusiastas de Bion abandonan la tarea de seguir profundizando en su pensamiento.